William Shakespeare es considerado como el escritor más célebre en lengua inglesa.
De las características principales del estilo literario de Shakespeare habría que resaltar ante
todo su gran poder de síntesis, unido a un extenso y exquisito a la vez que preciso uso del
lenguaje.
Asimismo, es importante en su obra la ausencia de un juicio de valor por parte del autor
sobre la moralidad de las conductas y actitudes de sus personajes (algo poco usual en los
autores de la época).
Los protagonistas se encierran en sí mismos y se convierten en personificaciones de sus
virtudes, sus defectos y sus obsesiones, quedando al margen en muchas ocasiones de la
realidad que los rodea.
Las obras de Shakespeare han sido ampliamente traducidas a casi todos los idiomas y han
sido representadas en el teatro a lo largo de los siglos. Además, se han hecho innumerables
películas y series de televisión así como óperas y otras representaciones.
Su obra sigue siendo representada en la actualidad en los mejores teatros del mundo, tanto
respetando la versión original como en adaptaciones modernas de las mismas.